Por Valentina González • Fotos Camila G. Jettar

Tiene 35 años, nació en Córdoba (Argentina) y desde muy pequeña vivió y creció en Buenos Aires. Parece que Uruguay la conquistó, pero ella supo hacer lo mismo con los uruguayos. De buen comer, con placer por lo estético y lo visual, nos sorprende con su mirada crítica y profesionalismo. Una de las personalidades más interesantes de la televisión nos habla de sí misma, de Jacinto y de su experiencia en Master Chef.

LARA. ¿Cómo era Lucía Soria de niña?
L. S. Era una niña alegre, creo que era un poco mandona, bastante extrovertida y creativa.

¿Siempre supiste lo que querías hacer?
Supe más o menos lo que quería hacer cuando terminé la Secundaria. Siempre cociné, pero en esa etapa de la vida empecé a hacerlo un poco más en casa. Ya con mi primer trabajo como ayudante de cocina se consolidó el deseo de seguir por este camino. Igualmente ser Chef es algo que uno reafirma todos los días y es fundamental tener un equipo en el cual confiar, que te respalde y que refuerce tu trabajo.

¿Cómo viviste el nacimiento de Jacinto?
Fue muy lindo, lo vivimos con mucha expectativa y alegría. Yo tenía ganas de tener un proyecto que fuera de todo el año, en un lugar donde pasara mucha gente y pensaba en algo que también fuera turístico. El crecimiento en estos cinco años ha sido enorme, todo fue tomando forma, el local en sí mismo creció pero además nosotros estamos todo el tiempo trabajando para crecer y para seguir interpretando qué es lo que realmente queremos ofrecer.

Una persona cocinando, ¿muestra su personalidad?
Sí, creo que sí. Se puede ver si es ordenado o no, si es limpio o no, se ve cuán meticulosa es la persona. El hecho de comer y reunirse en una mesa es una acción muy linda. Gozar de la comida y tomarse el tiempo para cocinar y comer, une mucho a la gente y esto habla de los intereses humanos.

¿Cuál fue la mayor enseñanza que te llevaste de tu maestro Francis Mallmann?
Creo que me enseñó mucho sobre la estética, de qué forma se ven lindas las cosas. Me enseñó a usar flores, verdes, me ayudó a pensar en cómo decorar. Esto fue una gran enseñanza. Pero también me transmitió la importancia de armar equipos y confiar en la gente que trabaja al lado de uno, crear uniones que lleven a conocer más a tu equipo de trabajo para sentirte más cómodo y poder lograr mejores resultados.

¿Cuánto pesan los recuerdos en tu cocina?
Pesan mucho, se aprende de los errores, de toda la gente que está a lo largo del camino; de colegas, de personas que uno admira y esto sumado a las vivencias y recuerdos de la infancia, son cosas muy importantes para los sabores y la cocina.

¿Te gusta verte en televisión?
A veces sí y a veces no, depende…Me divierto mucho haciendo Master Chef. Creo que es un programa muy lindo y que está muy bueno para Uruguay.

¿Has logrado consolidar un personaje para los medios o lo que vemos es tu manera cotidiana de ser?
Lo que se ve en televisión es una parte de mí cumpliendo una función muy específica que es ser jueza. Allí estoy para juzgar a la gente por las cosas que hace y por las cosas que cocina. En un sentido sí, es un personaje pero yo no estoy actuando. Digamos que es una parte de mí pero no tan real a como soy en la vida cotidiana.

Enseñando y trabajando uno siempre aprende cosas, ¿qué te deja Master Chef como enseñanza?
Como enseñanza principal me queda esta idea de que siempre está bueno perseguir lo que uno quiere y que también se puede evolucionar mucho si se le pone voluntad y ahínco a lo que se quiere hacer. Además, me enseñó que la televisión es muchísimo trabajo y que hay un grupo enorme de gente que generalmente no se ve y suele hacer mucho más que los que estamos frente a cámara.

¿Qué destacarías de Puglia?
Sergio tiene la humildad de la gente que ha vivido mucho y eso es algo muy valioso. Es un gran compañero y además es una persona sumamente divertida y linda para tener al lado.

¿Y de Lauren?
Es un hombre con un gran, gran corazón. Además, es una persona que sabe muchísimo y también es un gran compañero.

¿Cómo ves a Nilson? ¿Pensabas que podía ganar la competencia?
Lo veo como alguien que siempre fue muy determinado en lo que quería hacer. Y sí, lo pude ver como ganador varias veces. Creo que por suerte fue él, porque lo tuvo muy merecido, porque sé que le hizo un bien enorme y también a su familia. En la competencia Nilson pudo expresar muchas cosas importantes que él quería transmitir y le mostró a mucha gente que los sueños son posibles y que está bueno querer y hacer.

¿A qué te dedicaste más a la hora de organizar tu boda?
Por suerte hubo mucha gente que me ayudó; la gente del local, Francis Mallmann, mi asistente y todo el equipo de Jacinto hizo que fuera un gran alivio casarse. Lo que me parecía más importante era que nosotros la pasáramos bien, que estuviéramos cómodos y que la gente la pasara bien también.

¿Qué cosas te gusta compartir con tu pareja?
Nos gusta disfrutar de la tranquilidad, de estar con un fuego, cocinando algo y tomando un vino. Estar al aire libre también nos encanta y por suerte podemos escaparnos bastante para afuera y eso está buenísimo. La verdad es que somos bastante tranquilos y nos gusta mucho también viajar y salir a comer.

Ping pong gourmet

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Todo vegetal en su momento justo
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Sopas con muchos crocantes y hierbas
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Mi marido, mis amigos y un lindo lugar
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Comensales en Jacinto.

Equipo de Jacinto.